domingo, 20 de mayo de 2018

EN EL PACTO DE TOLEDO SE ENCUENTRA LA SOLUCIÓN


El movimiento de pensionistas en mi ciudad Badalona, en su reunión semanal, manifiesta la opinión que se deben marginar a los principales sindicatos, UGT y CCOO, pues los consideran tóxicos para su movimiento, donde dominan la situación los llamados sindicatos minoritarios, como la Inter Sindical, o la misma CGT, también incluyen en sus demandas, la disolución del Pacto de Toledo pues le consideran en parte culpable por inacción de la situación actual del tema. Me sorprende  y me preocupa que la ideología de los anti sistema se instale en este movimiento, pues si bien es positivo que el pueblo llano, se movilice en defensa de sus intereses, si es interesante que Partidos Políticos y Organizaciones Sindicales, sean quienes recojan estas demandas y en su cualidad de representantes de los ciudadanos, acaben acordando y pactando las soluciones concretas.

Alguien me podrá decir que Partidos y Sindicatos han cometido errores de bulto y muchas veces han aparcado el interés de las mayorías a favor del suyo propio como organizaciones. Ahora mismo en Cataluña, nos encontramos con CCOO i UGT, apoyando un movimiento surgido del independentismo en defensa de los Políticos Presos y de sus tesis, bajo la denominación de “Espai Democracia i Convivencia”,  que muchos asalariados no ven con buenos ojos de ninguna de las maneras; tampoco debemos olvidar que los sindicatos reciben cuantiosas subvenciones por parte de la administración lo que les permite subsistir holgadamente sin necesidad de una afiliación muy grande, cuestión que a muchos les hace sospechar connivencias no demasiado favorables a los intereses de los trabajadores. No les falta razón; sin embargo, como demócratas debemos aceptar que son las instituciones que nos representan las que deben realizar su trabajo, una vez han recogido el sentir ciudadano. y por ello no es conveniente mantenerlos al margen de movilizaciones y mucho menos predicar su disolución.

Uno de los elementos que desde el año 1995 ha resultado fundamental en el tema de las pensiones ha sido el llamado Pacto de Toledo. Un organismo conformado por la totalidad de partidos con representación parlamentaria, además de los representantes de los principales sindicatos y organización patronal; que analiza todas las propuestas que hace el gobierno de turno y emite su dictamen, fruto del consenso entre todos sus miembros, haciendo además las recomendaciones que cree convenientes. De hecho, se trata de un organismo cuya finalidad principal, es alejar las decisiones sobre el tema de pensiones, de la exclusividad del gobierno de turno, con la pretensión de evitar que una sola formación política por el hecho de gozar de mayoría absoluta, pueda decidir cambiar el sistema sin tener en cuenta a los demás. Fue así que en este organismo, se pactó “La separación y clarificación de la fuentes de financiación” “La creación de un fondo de garantía para las pensiones” “La Financiación, simplificación e integración de los Regímenes especiales”, y muchas otras.

La crisis económica y la mayoría absoluta del gobierno ultra liberal de Mariano Rajoy su la primera legislatura, con la excusa de la presión de la UE y la necesidad de tomar decisiones urgentes para paliar la crisis económica, promulgó una serie de decretos sin consultar a esta comisión parlamentaria y obviando su consejo, no solo dejó a cero el fondo de garantía, lo que se llama vulgarmente la hucha de  las pensiones, si no que se ha dedicado a desmontar el actual sistema por completo, no buscando las soluciones adecuadas para mantenerlo y financiarlo suficientemente. Ello ha conllevado que algunos ciudadanos, culpen de inacción o de mirar para otro lado al Pacto de Toledo, y quizás podríamos decir que a ello también ha contribuido, la posición en cierta manera timorata de las centrales sindicales que en ciertos momentos han dado la impresión de total falta de voluntad de enfrentarse al gobierno, y su reforma laboral, la gran responsable de la bajada de salarios y en consecuencia de la mala financiación del sistema de pensiones.

A pesar de lo dicho, estoy convencido que el Pacto de Toledo sigue siendo una buena solución para tratar el tema de las pensiones públicas de una manera democrática, pues el hecho de que participen en el todos los partidos con representación parlamentaria, le da una cierta garantía que este tema no va a ser cuestionado por una ideología concreta, aunque vista la experiencia reciente, quizás debería garantizarse la obligación del gobierno de turno de consultar sus proyectos sobre el tema a este organismo y que sus acuerdos deban ser tomados por mayorías cualificadas.

El actual movimiento de los pensionistas, me dá que es una buenísima oportunidad para mejorar y poner al día al Pacto de Toledo, corrigiendo lo que funciona mal de él y poniéndolo a trabajar muy en serio, para que en poco tiempo encuentren un nuevo sistema de financiación, con el fin que los pensionistas no vean reducirse su poder adquisitivo, y que los futuros pensionistas no tengan el temor de verse excluidos del sistema, por la cuestión del factor de Sostenibilidad de la pensiones que el gobierno Rajoy quiere empezar a aplicar este mismo año y por el que con el aumento de la esperanza de vida se van a reducir  las cuantías de las pensiones.

1 comentario:

  1. Pues yo pienso que el pacto de Toledo NO es la solución , ya ha estado vigente y mira donde estamos , las reuniones actuales y se han aplazado de momento tres veces . saludos

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