Mariano Rajoy y el
Partido Popular optaron desde hace tiempo por, tapar la corrupción nacida en el
seno del aznarato, amparándose en un poder judicial, que creen tener dominado,
pero que la magnitud del expolio a que han sometido el país, le pone incluso en
entredicho con el peligro de hacerle caer, se ve obligado a actuar con presteza
y justicia, caiga quien caiga, cuando una mayoría de ciudadanos ha llegado
incluso a dudar de la independencia judicial del estado.
Amparado en el
clientelismo, la nueva manera de denominar el caciquismo, el PP parecía inmune
a la corrupción más descarada y por mucho que saliera a la luz no ha asumido
responsabilidad política alguna, sino todo lo contrario intentando tapar a sus
corruptos, hasta las últimas consecuencias, hasta el punto en que hoy una
mayoría de la sociedad, tal y como han explicado los jueces en la sentencia del
caso Gürtel , está plenamente convencida que el Partido popular actúa igual que
una trama mafiosa, en lo que a corrupción se refiere.
El pasado viernes 25,
después que el Secretario General del PSOE, Pedro Sánchez, registrara en el
Congreso la petición de un Moción de Censura; a las dos de la tarde comparecía
Mariano Rajoy, en rueda de prensa, muchos creímos que lo hacía para disolver el
parlamento, convocar elecciones generales y presentar su dimisión irrevocable;
tal y como hubiera hecho cualquier mandatario de un país democrático, sin
embargo lo que hizo fue seguir con la tónica habitual, cargar contra la
oposición, acusándola de perjudicar España y manifestar su intención de agotar
la legislatura, ninguneando la sentencia judicial, como si no fuera con él;
provocando la indignación de muchos, entre ellos sus propios aliados
Ciudadanos, que si ya el día anterior le negaban el pan y la sal de su apoyo
parlamentario, se encontraron en la incertidumbre de apoyar una moción de
censura del PSOE, o seguir manteniendo a Rajoy en la Moncloa hasta el año 2020.
Las cadenas de TV
sacaron el polvo de sus “pactómetros” y empezaron a elucubrar sobre posibles
pactos más o menos posibles o del todo imposibles, así los más decididos como
ERC y PDECAT, mostraron su cara de negociantes marcando unas condiciones
imposibles de asumir, por parte de nadie que pretenda acceder a la Presidencia
del Gobierno de España, El PNV, dando muestras de una gran prudencia, pide
conversar con Pedro Sánchez y su equipo, para garantizarse que lo que ha
obtenido del Gobierno Rajoy, a cambio de la aprobación de sus presupuestos se
va a mantener. Y yo me pregunto, si Pedro Sánchez no les acepta las condiciones
a PDECAT y ERC, ¿Estos partidos serán capaces de votar no o abstenerse en la
moción de censura, dándole apoyo explicito al gobierno del Partido Popular y a
Mariano Rajoy como presidente?
Por otro lado está Ciudadanos
que en el momento de escribir estas líneas, sigue manteniendo que es Rajoy
quien debe convocar las elecciones y que si no lo hace la moción de censura
debe obviar un plazo para regenerar la situación de las instituciones del
estado y del gobierno, para convocar elecciones inmediatamente.
Uno que intenta ser
lo más equitativo posibles y conservar la calma y serenidad en los momentos
convulsos que la política española y mundial nos deparan. Creo que en España
estamos ante la hora de la verdad y que los partidos políticos que se
consideren democráticos deben dejarse de estrategias y marrullerías, para
afrontar la situación más grave que nuestro país ha vivido desde la
restauración de la democracia. Es ahora que los partidos deben demostrar que el
sistema democrático es capaz de auto regenerarse, que desde una altura de
miras, deben saber mantener la estabilidad necesaria para no dar al traste con
la recuperación económica; Los ciudadanos en general, deben ver que en
beneficio de todos, debemos remar juntos en la misma dirección, obviando las
diferencias que existen entre nosotros. En fin que demos entender el grave
peligro que la actual situación puede comportar para las futuras generaciones,
por lo de la nula credibilidad internacional. Pues ¿Cómo van a entender nuestro colegas europeos, que no seamos
capaces de dar una solución política a la grave situación? ¿Cómo van a entender
que no echemos con cajas destempladas a un presidente de gobierno y de un
Partido político que los tribunales han determinado son una institución
corrupta?
Estoy de acuerdo en
que los hechos que se han juzgado ahora corresponden a la época de Aznar, pero
¿Quién nos garantiza que no hayan seguido operando de la misma forma en la
etapa Mariano?
Es hora de demostrar
madurez democrática de los ciudadanos españoles, es hora que la generación
que no conoció la dictadura, demuestre
su capacidad de racionalidad y de trabajar codo con codo para el beneficio de
toda la colectividad.
Es de nuevo la hora
del PSOE, el partido que puso a España en el mapa de Europa y que ahora le toca
de nuevo, reconducir al país a la senda del progreso.