lunes, 1 de octubre de 2012

CATALUÑA ¿RESCATADA? ¿INTERVENIDA?

Uno de los grandes males que a mi entender adolece nuestro sistema democrático, es la poca o nula capacidad de nuestros políticos, mayormente los de derechas, de reconocer cuando han fracasado en sus políticas, al no obtener los resultados que habían prometido en su campaña electoral.
 
En el caso de Cataluña, después de 7 años de gobiernos de coalición de fuerzas izquierdistas, con la presidencia de los socialistas Pascual Maragall y José Montilla, un Artur Mas, representante de la nueva generación de la derecha nacionalista catalana, consigue la poltrona del Palau de la Plaça de Sant Jaume; en base a una campaña electoral, de responsabilizar al anterior gobierno tripartito de los males que aquejan a Cataluña, ofreciendo como solución una gestión totalmente innovadora, y exigente con el gobierno central, por la que en base a una mayor autonomía en la gestión de los propios recursos, se impulsaría la actividad económica, consiguiendo en poco tiempo, encarrilar el país hacia una pronta salida de la crisis económica.
 
Dos años después de a victoria electoral de Mas, los resultados no pueden ser más desesperanzadores, pues además de ser la autonomía, más endeudada en valores absolutos, ha agotado absolutamente su capacidad de refinanciación, incluso con los llamados bonos patrióticos, que reinstauró el tripartito, con el fin de comprometer a los ahorradores catalanes en la financiación de su gobierno autonómico.  Es bien sabido que las agencias internacionales de rating, consideran los bonos emitidos por la Generalitat de Cataluña, al nivel de los bonos basura, y la llamada prima de riesgo de la deuda Catalana, supera ya los 1.200 puntos, cuestiones que invalidan totalmente la capacidad del gobierno catalán a la hora de buscar financiación en el exterior.
 
Son pues estas las razones que han obligado a los responsables económicos de la Generalitat, a solicitar un primer rescate urgente de 5.023 millones de euros al gobierno central, a fin de atender los vencimientos de la deuda del último trimestre de este año 2012.
 
Aunque de entrada, Mas quiso hacer el gallito, diciendo, que no hacia otra cosa que solicitar el dinero que los catalanes habían pagado con sus impuestos, y que por ello no debía tener ningún condicionante político, lo cierto es que se trata de una intervención en toda regla, pues cuando uno se encuentra en la tesitura de no poder acudir a nadie más, como es el caso, esta de hecho sometiéndose a todas las condiciones que el prestador quiera imponerle y  hoy y aquí, esto es extremadamente peligroso, por la manifiesta animadversión ideológica del Partido Popular, en el gobierno de España, frente al autonomismo. No olvidemos que Manuel Fraga, en los gloriosos tiempos de la Alianza Popular, el precedente del PP, predicaba el voto negativo a la Constitución, en desacuerdo únicamente, en los artículos que hacia referencia a este nuevo modelo de estado.
 
¿No es un gran fracaso del gobierno catalán haber llevado al país a este punto?  No vale ya echar la culpa a los anteriores gobiernos de Maragall y Montilla, como aún siguen haciendo los secuaces de Mas, dos años de gobierno son más que suficientes para un buen gestor, para invertir las tendencias, y hoy en Cataluña, si no se hubiera optado, por seguir la doctrina neoliberal que desde la derecha se nos impone de una austeridad absoluta, quizás nos miraríamos el panorama de manera bien distinta desde un camino de crecimiento, que nos haría pensar al menos en la utilidad de los sacrificios que nos han exigido hacer a todos los ciudadanos.
 
Hoy Artur Mas, en su afán de huir hacia delante para esconder el fracaso de su gestión, convoca nuevas elecciones enmascaradas de plebiscitarias, no por la gestión realizada, si no una aventura independentista condenada al fracaso de antemano, por ser incompatible con la nueva idea de Europa y del mundo que ha de configurarse a la salida de la crisis.
 
Espero y confío en el buen sentido de la mayoría de los catalanes que no se dejen llevar por arrebatos, o pasividad extrema y comprendan que las soluciones rupturistas o continuadoras de lo mismo que se plantean des de los nacionalistas de uno y otro signo, no van a llevarnos a ningún sitio y que solo la solución federal para España que se propone desde El PSC y el PSOE, nos permitirá superar los problemas que nos atenazan a todos.

3 comentarios:

  1. Hola Cosme,

    Soy uno de esos ciudadanos perplejos ante todo lo que está ocurriendo y que cada vez tiene menos claro que puede hacer para cambiar el tétrico escenario que se nos dibuja cada dia.
    Me gusta leer tus comentarios y los tengo en consideración, con algunas cosas estoy de acuerdo, con otras no tanto, pero en el fondo creo que vamos en el mismo sentido.

    Con la clara sensació de que los actuales políticos, todos, son incapaces de sacarnos del agujero donde nos encontramos, pero con la más clara certeza de que de la actual situación sólo nos puede venir de la política, la de verdad, la de escuchar a los demás, la de la voluntad de entendimiento, la de buscar el bien común,no de la partidista, no de la tacticista a corto plazo, no de la que tenemos ahora.

    ¿Como recuperar la confianza en un sistema podrido y que no tiene la mínima intención de regenerarse (los propios partidos no lo permiten)?

    ¿Como no desear algo que rompa el estado actual de la politica?

    ¿Por qué desear la independencia de Catalunya, si tener problemas por sentirme español, y a sabiendas de hacerle el juego a quien huye hacia adelante como mal menor?

    Simplemente espresarte mi frustracíon como ciudadano, y esperando "consuelo" en las opiniones de los demás.

    6Q

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  2. Bueno y eso que se suponía que los grandes ahorradores son los catalanes. ¿y piden la independencia? Los veo por Cádiz buscando los duros antiguos.
    Me lo llevo y comparto, como siempre me gustan tus artículos. Aprendo mucho y me aclaras mucho.

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  3. Hoy he empezado a ver la luz,creo que he encontrado la esperanza.

    En las próximas elecciones podré elegir entre quedarme con la misma estructura política y social que aborrezco y detesto, o elegir por tomar un camino incierto, que no se donde nos puede llevar, pero que no puede ser peor que lo que tenemos, y que me permitirá imaginar una sociedad diferente.

    Aqui en Catalunya tendremos esa opción, desgraciadamente en el resto de España (Euskadi va a la suya), no la tienen. Sólo por eso ya vale la pena.

    Gracias por tu espacio y la posibilidad de expresarme en el.

    6Q

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